lunes, 21 de febrero de 2022

Relatos cortos: Canción del olvido


 Avanza el tiempo inexorablemente. Los días se suceden y se consumen tan pronto que apenas nos da tiempo a saborearlos al completo, pero sí que lo hacemos cuando alargamos esos momentos que nos satisfacen. Ciertamente, nos frustramos mucho, porque son tantas las expectativas que generamos que nunca estamos a gusto del todo. ¿Cuántos pueden asegurar que son felices a tiempo completo?  Bueno, infelices tampoco. Es tan fácil olvidarse de tantas cosas inútiles...Pero, ¿y cuando se olvidan sin remedio los pasos de nuestra vida; lo malo, lo bueno, las personas, lo que amamos, lo que odiamos?

Cuando se borran los recuerdos, cuando el pasado se apaga y sólo deja retazos, apenas unas piedrecitas, unas migajitas de vida, es el principio del fin. Entonces nada es reconocible, todo es extraño, no tiene sentido vivir. De eso va mi primer relato.

Los dos restantes van por otros derroteros, fantasía y ficción, algo de humor; y, aunque no todo es inventado, siempre aparecen mis vivencias, las costumbres de mi tierra , mi Andalucía querida, mi pequeño microcosmos.

Título: Canción del olvido

Ayer empezó a dibujarle en el brazo un tiovivo, como aquel que tanto le gustaba disfrutar de niña cuando montaba en su caballito preferido, el rojo con manchas blancas. Ha esbozado una sonrisa al imaginar que volvía a dar vueltas y ha girado los ojos desde su pequeño mundo donde ahora vive. Porque hace tiempo que olvida irremediablemente todos los recuerdos. Al principio, los más cotidianos; con el paso de los días, los más lejanos. También olvidó a su hijo.
Esta tarde, al acercarse a ella, ya le mostraba el brazo. Y de seguido una palabra al fin ha salido torpemente de sus labios: ¡papá!

Título: Sin pedigrí

A mí me parecen manchas de rotulador. ¡Qué va a ser la variante "dálmata"! Este marido mío tiene tanta necesidad de llamar la atención que está decidido, irá a la tele. Como le pasen un algodón empapado en alcohol, le chafan el invento. Se aprovechará de su más que evidente albinismo y, lo que le faltaba, haber dado positivo en el test de antígenos y presentar una tosecilla aflautada, remedo de ladrido de perro consentido. ¡Que no es una enfermedad vírica, es un burdo pintorreo de rotulador permanente sobre lienzo blanco de piel! Pero,"pobretico" mío, siempre pegado a mi falda, quién le quita la ilusión.

Título: Pasión en la calle
No había flecha que le pudiera hacer daño ya, ni saeta de amor que alcance su corazón, entregado como está a una pasión viva y muy sentida. Cuando un rayo de sol besa su rostro en la mañana más luminosa del año, se muestra orgulloso y altivo frente al mundo. Avanza por la calle ajeno a las miradas curiosas que admiran, cuando no desean, su cuerpo escultural, su vientre procaz, su espléndida presencia, su quietud asentada en el pedestal.
Va para tres años que el joven guarda jurado suplanta en la procesión al patrón santo, San Sebastián mártir, la más venerada imagen en la iglesia del pueblo.

4 comentarios:

Campirela_ dijo...

Cada uno de los tres micros tienen su esencia, el primero lo definiría tierno, el segundo ilusión por algo y el tercero acto de fe.
Muy buenos así pues me quedo con todos, jajja. Un abrazo y felicidades.

Ester dijo...

Son diferentes o los he leído con una mirada nueva cada uno, el último mantiene la fe y seguro que servirá para todos. Un abrazo

Albada Dos dijo...

Textos magníficos para la Ser, me encantaron, la verdad

Un abrazo

Recomenzar dijo...

Aun recuerdo tus entradas y hoy de casualidad te encontre en un mundo como el que hoy se vive se extrañn personas como tu