jueves, 19 de mayo de 2022

Relatos cortos: Celindo en mi jardín

                                                     
Parece evidente que me he propuesto escribir sólo relatos cortos de hasta cien palabras. Me entusiasma la idea de escribir encorsetado en esos límites, porque me obliga a contar una historia ahí, dentro de esa botella de cristal en la que sólo caben un puñado de palabras. También el hecho de tener que iniciar el relato con una frase ya determinada dificulta el ejercicio creativo, pero así el esfuerzo y el resultado pueden resultar más satisfactorios.

Contaré un secreto, siempre supongo que lo lograré, pero casi hasta última hora, el jueves a las 12:00, no consigo enviarlo. El parto dura varios días desde que se lanza la frase inicial, desde el lunes al jueves, hasta dar a luz. A veces me desvelo y en plena madrugada me hallo componiendo mentalmente el puzle, luego intento escribirlo en borrador y finalmente lo cierro, la mayor de las veces con cien palabras justas. Pero no se os ocurra contarlas. 

Bueno, espero os resulten interesantes mis criaturas. 

Un saludo

 Título: Visión panorámica

Entonces seré yo quien necesite un amigo imaginario que alivie mi soledad, porque aquí sólo veo fantasmas que viven en su ínsula particular: el abuelo ya sólo habla con Dios desde su ceguera infinita; como la abuela, clamando en su infierno de voces y lamentos. Y estos niños, que ya no juegan en un nuevo mundo de espejos rotos, de mentiras y "likes". Pobre madre, buscando un momento de paz y descanso que nunca halla ni en sueños.
Y yo, que sigo aquí, aunque me fui demasiado pronto, sufro por ellos, encerrado en este horrible retrato de boda y esto no hay espíritu que lo agua
nte.

Título: Alguien lo hizo

Recorro su cabecita con mis membranosas manos hasta taparle la boca y la nariz, ella no puede respirar bajo el agua.
Las nutrias que vigilan el pantano pueden socorrer a quienes sumergen por sorpresa sus cuerpos, a saber porqué.
Ayudan a los desesperados que quieren salir a la superficie; los otros, esos que se hunden como piedras sólo ansían el silencio del fondo.
Esta niña blanca y huesuda de ojos grandes y largos cabellos, que brillan como el sol, ya reposa a salvo junto a los juncos de la orilla. Aún un hilo de sangre recorre sus muslos y unos moratones florecen en su rostro.


Título: En un futuro no tan lejano…

…los siguientes serían los niños, pero ahora son ellos, Fátima y Karim, que esperan en el consultorio. Saben que, si no lo hacen, tendrán que regresar a su lugar de origen. No están preocupados por el abuelo, lo dejarán en paz, dicen que sería un despilfarro gastar recursos en él, no le interesan los viejos.
Cuando les llega su turno, rezan calladamente en dirección a la sala de curas, temen que ya no lo puedan hacer más. Después de esta intervención, le aseguran que tendrán trabajo al entrar en el sistema como ciudadanos de pleno derecho. El chip prodigioso les hará al fin libres.



4 comentarios:

Campirela_ dijo...

Si ya es complicado contar una historia, mucho más lo es cuando hay un limite de palabras, y tú los has conseguido que con 100 tenga sentido y coherencia lo escrito , además de estar geniales. Felicidades y a seguir escribiendo. Un saludo.

Un poco de todo dijo...

Sigue escribiendo. Te he visto comentar.
Eres bueno.
Comentando se gana el cielo

Recomenzar dijo...

Si tu escribes corto ¿como llamas a lo mio?
Un beso enorme para ti

Chaly Vera dijo...


Me gusto vision panoramica
especialmente: "... encerrado en este horrible retrato de boda y esto no hay espíritu que lo aguante"
Muy bueno

Saludos