lunes, 15 de febrero de 2021

Así nace un relato

Resulta curioso que, cuando te pones a escribir, nunca sabes por qué derroteros va a discurrir ese producto de tu imaginación. Brotan las palabras como si de entre las piedras surgiera un manantial. Si logras romper el cascarón de una idea, como un torrente seguirán las palabras en tropel.

En el relato que sigue, el pico que rompió la idea ha sido una frase, la que encabeza el relato, "Cómo íbamos a imaginarnos que no sabía nadar" ya de por sí es un relato, por eso continuar a partir de ahí supone crear uno nuevo.

Título: Pez globo

Cómo íbamos a imaginarnos que no sabía nadar, si era la viva imagen de un pez: labios lívidos y abultados, ojos saltones, la piel escamosa… Era bien conocido en la ciudad, siempre rastreando contenedores de basura.
Se le veía caminar con dificultad, sus piernas tan juntas apenas despegaban los tobillos y sus bracillos cortos parecían aletas dorsales, y las manitas.., ¡apenas abría los dedos!
Aquel día espléndido de primavera caminaba por el borde del muelle, mirando ensimismado los pececillos, y cayó al mar. Como no salía a la superficie, todos pensaron que se quedó a vivir allí, en su medio natural, persiguiendo los barcos que van dejando esa estela de deshechos tan nutritiva.



3 comentarios:

Ester dijo...

Suponer es peligroso, mejor preguntar. Buen relato con moraleja el aspecto exterior no es el importante. Un abrazo

Albada Dos dijo...

Estupenda idea con la frase de la Ser, me h aparecido original, de verdad.

Un abrazo

Campirela_ dijo...

Muy lindo el relato corto, ya he visto alguno más de blogueros que participais en la SER y son estupendos. Suerte y a seguir en ello, alguna vez os darán el premio en justa respuesta a vuestro buen hacer. Un abrazo.